La hidroponía es un método de cultivo de plantas en el que las raíces se cultivan en un medio sin suelo, como agua, arena o sustratos especiales (cáñamo), y los nutrientes, a menudo opcionales, se suministran en solución. Este método de cultivo se utiliza cada vez más en todo el mundo, especialmente en zonas urbanas o donde la calidad del suelo es mala o limitada.
La hidroponía tiene muchas ventajas sobre el cultivo tradicional, entre ellas
1. Uso más eficiente del agua: requieren hasta un 90% menos de agua que los cultivos tradicionales. En un sistema hidropónico, se evita que el agua se evapore.
2. Mayor rendimiento: los cultivos hidropónicos crecen mucho más rápido que los tradicionales porque las plantas obtienen todos los nutrientes que necesitan directamente de la solución nutritiva sin tener que esforzarse por absorberlos del suelo. Los cultivos hidropónicos también permiten cultivar plantas en espacios más reducidos, lo que puede aumentar la eficiencia de la producción.
3. Reducción del impacto medioambiental: pueden reducir el impacto medioambiental gracias al menor uso de pesticidas y otros productos químicos. También pueden cultivarse en zonas urbanas, lo que reduce la necesidad de transportar productos agrícolas desde zonas rurales remotas.
4. Cultivo durante todo el año: la hidroponía permite cultivar plantas durante todo el año, independientemente de las condiciones meteorológicas.
5. Calidad superior del producto: la hidroponía permite un control total del entorno de cultivo, de modo que las plantas pueden cultivarse en condiciones óptimas, lo que garantiza una calidad superior del producto.
6. Ahorro de espacio: La hidroponía permite cultivar plantas en espacios más reducidos sin necesidad de utilizar grandes extensiones de terreno.
En conclusión, la hidroponía puede ser una herramienta útil en los esfuerzos por aumentar la producción mundial de alimentos.